Un manga sobre carreras de coches imposibles con traiciones, ninjas, monos, familias, y emoción, mucha emoción.
Esta adaptación realizada por mis queridos hermanos Wachowski y producida por el genial Joel Silver, apuntaba a ser un anime de imagen real para toda la familia, siendo la primera película con este target de los hermanos.
Pese a no haber rendido en taquilla tan bien como debería la verdad es que a mi me ha encantado. Tiene todo lo que una buena película tiene que tener, buenos personajes, buena historia, buena banda sonora, y mucha emoción.
Si bien es cierto que ver un anime en imagen real puede resultar difícil para un publico que no conoce el medio del anime, para cualquier fan, aficionado o adepto resulta una obra impecable.
Los efectos especiales (el 80% de la película) son tremendamente alucinantes, aunque algo difíciles de seguir en algunas carreras,, y están muy bien acompañados por una de estas bandas sonoras que oigo mas de una vez por su fuerza y estilo. Todo lo referente a las carreras, los circuitos, los coches, los ataques, la acción y el Kung-fu Car esta realizado de una manera espectacular, divertida y emocionante.
El montaje es alucinante, bueno como pocos, y tanto los primeros planos como los fondos están filmados enfocados y en HD, para que al montarlo tenga un toque mas de anime aun si cabe.
Los personajes son variados y muy fieles a los originales, no solo en carácter si no física y estéticamente. Alabo la labor del departamento de caracterización. Especialmente el protagonista, Speed es clavado a como es en el manga/anime. Toda su familia, incluido su molesto hermano menor y su escandalosamente bella novia Trixie (Christina Ricci) son muy fieles al original pero con afortunadamente mas matices y profundidad.
Otra cosa que me encanta son los personajes femeninos,los tres principales, la madre de Speed, Trixie y la hermana del japones no solo son útiles e importantes si no que son geniales!! La madre lo mismo te hace un sandwich que una soldadura de doble lazo, Trixie es mejor piloto que la mayoría de los hombres de la formula 1, por no hablar de las Zorras Voladoras...
En definitiva una muy interesante y muy divertida película espectacular para toda la familia, y especialmente atractiva para los amantes del anime. Si les hubieran dado DragonBall a los Wachos seria una película genial y no esa chufa que se esta cociendo que asusta por tener peor pinta que aquella versión de los 80. Eso si, no esperéis verla como una película normal o realista por que ningún anime lo es.
Le doy un bien merecido 9 de 10, por que me hizo emocionarme, pro que me hizo llorar, por que tiene flashbacks y flashfowards, y por que me ha encantado y he tenido que ir a verla 3 veces.
Acción, velocidad, artilugios, traiciones, ninjas, peleas,carreras, y todo lo necesario para convertirse en un Must Have.
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